Hoy el sol se ha levantado con tos, tiene frío y no tiene ganas de levantarse.
La luna le ha traído una bufanda y le ha puesto el termómetro. La nube de enfrente ha preparado leche caliente. El amanecer ya está preparado.
La luna le ha traído una bufanda y le ha puesto el termómetro. La nube de enfrente ha preparado leche caliente. El amanecer ya está preparado.
![[c_paraguas[2].gif]](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh7q2wcFlPPb4uXc9pc1smP_MIn-5soF3VLn89AV_hseMQXfnRrYqKaIwaQszp4J-Hxh06dHG6OhMpEqZN387t7iXWKx3aRAXs2xYGlSE9HGt2VfMnPWyeraQBBq0zN5Usp99t32elaGBEX/s200/c_paraguas%5B2%5D.gif)
Convocaron una reunión de urgencia en la Estratosfera y establecieron, pese a todas las predicciones metereológicas de los telediarios, que ese día amanecía nublado y que iba a estar así hasta que el Sol tuviese la suficiente fuerza para brillar y dar calorcito.
Así fue que, contra todo pronóstico, amaneció lluvioso.
… Y los de las estaciones de meteorología no entendían nada.
… Y los paraguas tan contentos.
… Y las estrellas mientras tanto, hacían turnos para cuidar al Sol.
En esto que llegó la madre del Sol, se quedó ahí al ladito y le dio uno de esos besos que lo curan todo.
… El Sol se empezó a recuperar, aparecieron los claros… y al día siguiente… amaneció un día precioso contra todo pronóstico, porque ya habían dicho en los telediarios que iba a seguir nublado durante unos días más.
… Y los paraguas tan contentos porque ya querían descansar un poco.
En fin, no hay nada que no pueda curar un beso.
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